“Doy gracias a Dios porque me ha permitido salir de la soledad en la que he estado viviendo toda mi vida. Desde mi infancia, creía en Dios, pero era un Dios muy lejano y crecí con necesidad de conocerlo. Más tarde, alguien me habló de la Biblia y empecé a leerla y no la entendía. Hace seis años, un domingo al encender la tele, encontré un programa llamado “Buenas Noticias TV”; llamó mi atención sobre todo el saludo final que dice: TÚ VALES MUCHO PARA DIOS. Y desde entonces lo sigo domingo a domingo. También mediante este programa conocí a mi pastor (hace tres años atrás) y fue él quien me puso en contacto con la Iglesia Evangélica y con los hermanos de la iglesia a la que ahora pertenezco.”